Cuando un piano se deja muchos años sin afinar, experimenta una pérdida considerable de la tensión de las cuerdas, lo que provoca una desafinación severa. Con el tiempo, las cuerdas pueden oxidarse llegando a asentarse de tal manera que aumenta el riesgo de rotura al intentar afinarlo nuevamente. La estructura de la madera del piano también puede verse afectada, ya que sin el mantenimiento adecuado, los cambios de temperatura y humedad provocan deformaciones que alteran la estabilidad del instrumento. Además, los mecanismos internos, como los martillos y las teclas, pueden perder movilidad debido al óxido y el polvo. Afinar un piano en estas condiciones puede requerir múltiples sesiones.
Esta tarde hemos dado un pitch raise a La 440 hz a este piano Wurlitzer modelo WP-50 del año 2000 para Guillermo, Uruapan (Michoacán). Muchas gracias por darme trabajo, ¡que lo disfrutes!
José Antonio Ruiz Rabelo
Afinación y restauración de pianos y clavecines en CDMX
cel. 5539212135
Comments